|
Madrid. ROSAURA CALLEJA
En esta
primera edición del certamen, el Plan de prevención de la violencia de
género, que ha desarrollado el IES Cuenca del Nalón de la localidad asturiana
de La Felguera, obtuvo el primer premio. Este programa comenzó en el año
académico 2003-04 y se incorporó a la Programación General Anual del centro
durante los sucesivos tres cursos. A lo largo de su trayectoria se ha
llevado a cabo un plan de formación en centros dirigido a la sensibilización
y formación del profesorado y un programa Sócrates, Comenius 1.1, “Gender,
equal 2 equal”, que ha sido el más valorado por la administración educativa
asturiana. Además, el alumnado y las familias se han implicado a través
de distintas actividades de sensibilización y aprendizaje.
“Coeducación:
una necesidad de nuestra sociedad multicultural”, presentado por el Colegio
de Educación Infantil y Primaria “Severo Ochoa” de San Javier (Murcia),
y “Trabajar la igualdad, prevenir el maltrato”, realizado en el IES “Salvador
Allende” de Fuenlabrada (Madrid) son los trabajos que han compartido el
segundo premio.
Mientras
que los terceros han sido para “La mujer entre Sanchos y Quijotes”, elaborado
en el CP “Plácida Herranz” de Azuqueca de Henares (Guadalajara), “Mujeres
invisibles”, desarrollado en el IES “Duque de Rivas” de la localidad madrileña
de Rivas-Vaciamadrid, y “Rompiendo murallas”, que se ha llevado a cabo
en el IES “Jinámar” de Gran Canaria.
Apoyo
al profesorado
El
acto de entrega de galardones estuvo presidido por Mercedes Cabrera, quien
tuvo palabras de reconocimiento a la labor de los profesores en la prevención
y la eliminación de la violencia de género.
Para
la ministra de Educación y Ciencia, la escuela constituye el espacio fundamental
en el que se produce la socialización y se generan nuevas relaciones y
“debe contribuir a eliminar de nuestra sociedad la violencia en general
y, especialmente, la ejercida contra las mujeres”.
Durante
su intervención, constató que, en los últimos 25 años, se ha producido
un “avance vertiginoso” en la incorporación de las mujeres a todos los
niveles educativos. A su juicio, el hecho de que más de la mitad del alumnado
universitario sea femenino puede calificarse de auténtica revolución,
dentro de un cambio muy profundo producido en la universidad española.
Pero apuntó, como necesario, fomentar la presencia femenina en estudios
donde aún es minoritaria, como muchas ramas de formación profesional o
determinadas carreras técnicas.
Colectivos
desfavorecidos
Por
último, hizo hincapié en la escolarización de determinados colectivos
especialmente sensibles, como niñas inmigrantes o pertenecientes a la
etnia gitana y las mujeres adultas que desean encontrar una segunda oportunidad
porque no tuvieron la primera.
Este
acto también contó con la participación de Soledad Murillo, secretaria
general de Políticas de Igualdad, quien señaló que sólo un 25% de la mujeres
que mueren por maltrato de sus parejas habían denunciado la situación
y reveló que estas mujeres no denuncian por “preservar la relación” por
encima de su propia vida, de su forma de ser y de actuar y del hostigamiento
que sufren. Asimismo, manifestó su preocupación porque la violencia persista
especialmente en mujeres jóvenes, formadas, que tienen un horizonte profesional
y que, sin embargo, por mantener una relación, pueden estar dispuestas
a renunciar a sus objetivos y actuar por encima de su propia salvaguardia.
|