En
2010 habrá 50 millones de desplazados medioambientales, la mayoría mujeres
y niños.
|
|
Madrid. ROSAURA CALLEJA
Este
documento denuncia que de los 250 millones de personas afectadas por desastres
naturales al año, el 50% son menores y que en la próxima década, hasta
350 millones de personas se verán afectadas por desastres naturales anualmente.
El cambio climático hace peligrar el desarrollo sostenible, agudizando
potencialmente la pobreza infantil y aumentando
su
|
|
 |
|
vulnerabilidad
a sufrir abusos, explotación o desplazamientos forzosos. Save the Children
revela que en el mundo muere un niño cada 15 segundos por falta de acceso
a agua potable, 40 millones de menores sufren malnutrición extrema y que
los Sistemas de Alerta Temprana y de Reducción del Riesgo en Desastres
de muchos países son pobres e inadecuados. Por ello, es urgente emprender
una acción internacional centrada en la infancia y el cambio climático.
El
informe anticipa que el impacto del cambio climático será especialmente
grave en comunidades que habitan en islas, en la costa y cerca de los
ríos. Los niveles del mar más altos tendrán graves efectos sobre la mayoría
de los 600 millones de niños que viven en zonas costeras, con tres veces
más densidad de población que la media mundial, como la pérdida de hogares,
mayor riesgo de inundaciones, el deterioro de infraestructuras de transporte
y agotamiento de bancos de peces. El aumento de los niveles del mar puede
conducir a la salinidad de los estuarios de los ríos, por lo que peligran
las aguas subterráneas.
Sequía
Este
documento constata que 40 millones de niños sufren malnutrición extrema.
La agricultura de subsistencia es muy vulnerable a variaciones del clima
y millones de menores dependen de ella, lo que les sitúa en una posición
especialmente peligrosa cuando hablamos de cambio climático. La mayor
parte de la actividad agrícola de los países en desarrollo depende de
la lluvia y necesitan niveles de precipitación predecibles.
Los
niños africanos son los que sufren mayores riesgos por la sequía provocada
por el cambio climático, particularmente en el Sahel y cuerno de África.
Hasta 220 millones de personas en este continente están expuestos a las
sequías cada año. Las perspectivas de ciclos repetidos de sequía son alarmantes,
ya que la malnutrición es la primera causa de muerte de menores de cinco
años. “Estos niños desnutridos estarán mas expuestos a enfermedades transmitidas
por mosquitos, como malaria y dengue, debido a las inundaciones, al calentamiento
y a los cambios en los periodos de lluvias”, manifestó José Miguel Contreras
en la presentación del informe. El presidente de Save the Children afirmó
que ya “nadie discuta la existencia del cambio climático” e hizo referencia
a la concesión del Premio Nobel de la Paz a Al Gore. Si bien la malaria
es una de las principales causas de muerte infantil, las inundaciones
asociadas al cambio climático incrementarán la probabilidad de que esta
enfermedad aparezca en áreas donde en la actualidad no es endémica.
Altas
temperaturas
Teresa
Ribera, directora de la Oficina Española de Cambio Climático del Ministerio
de Medio Ambiente, vinculó la lucha contra el cambio climático con la
lucha por erradicar la pobreza y afirmó que los retos a los que se enfrenta
la humanidad a causa del cambio climático “no tienen parangón”. Asímismo,
aludió a la situación en España que arroja unos datos “preocupantes”,
sobre el incremento de las temperaturas que podrán alcanzar hasta 7 grados
en el centro de la península. Paralelamente, el cambio climático hace
peligrar el desarrollo sostenible, agudizando potencialmente la pobreza
infantil y aumentando su vulnerabilidad a sufrir abusos, explotación o
desplazamientos forzosos.
Theodore
Oben, director de la Unidad de Infancia y Juventud del Programa de Naciones
Unidas para el Medio Ambiente, ha señalado que el medio ambiente tiene
“cada vez mayor protagonismo en los medios de comunicación y que la sociedad
valora especialmente vivir en un ambiente saludable”. A juicio de este
experto, “nadie puede protegerse” pero, para afrontar el problema, “necesitamos
compromisos políticos y sociales” y que “la educación es esencial para
influir en la población sobre una forma de vida más sostenible”.
Implicación
de los menores
Para
Save the Children, los gobiernos, las agencias humanitarias y la comunidad
internacional deben apoyar medidas para ayudar a los niños y sus comunidades
a prepararse para mitigar los efectos del cambio climático. Reducir las
emisiones de carbono en un 80% para 2050 y limitar el calentamiento global
a no más de 2 grados centígrados es una de las actuaciones que esta organización
propone a los países ricos. Así como, considera que los países donantes
deben transferir fondos para los programas de Reducción de Riesgos de
Desastres, con un especial enfoque a la protección de la infancia, su
acceso a la sanidad y la educación y ayuda al sustento de familias desfavorecidas.
También apuestan porque los niños deben estar activamente involucrados
en los esfuerzos destinados a mitigar el cambio climático.
En
el transcurso de este acto, Bianca Jagger, presidenta de la Fundación
World Future Council, hizo un repaso al informe de Save the Children y
advirtió que “no sólo los niños serán los afectados”, sino que todos sufriremos
las consecuencias. Durante su intervención, afirmó que “nuestras generaciones
serán analizadas” en un futuro, ya que “nuestras decisiones son fundamentales”
e hizo hincapié en que a los niños les preocupa el futuro y el cambio
climático, que ha constatado en las miles de cartas que han llegado a
su Fundación en el marco de la campaña “KidsCall” de concienciación sobre
el cambio climático y que éste ha propiciado una “corriente de pensamiento
cultural y político”. Esta campaña culminará el próximo año con la entrega
de estas cartas a los jefes de Estado que forman parte del G-8.
|
|